Amaia, Kudai y EntreNos hicieron llover canciones

Las dos bandas se presentaron con la vocalista en el anfiteatro del Sambil

La banda chilena agitó a la muchachada (Gabriela Pulido)

Ante la amenaza de lluvia, un grupo de chicas se encargó de repartir ponchos o impermeables en la entrada del anfiteatro del Sambil Caracas. "Tome, por si acaso&", decían ellas con una gran sonrisa. Pero lo único que llovió el lunes pasado fueron canciones.

A las 7: 15 p.m. arrancó el jolgorio del concierto Movistar con la actuación del quinteto venezolano de rock EntreNos, que aprovechó la ocasión para interpretar algunos de los temas de su placa nueva 1103, entre los que está La dejé sola, de la telenovela Calle luna calle sol.

Un buen abrebocas para lo que estaba por venir. Trajeados de negro como la noche, Pablo, Tomás, Bárbara y Gaby, todos de la agrupación chilena Kudai, subieron al escenario para despertar de inmediato la euforia juvenil con canciones como Hoy quiero, Nada es igual, Ya nada queda, Tú y Morir de amor, que fueron coreados de pie por la muchachada que abarrotó el aforo.

Como en la mayoría de sus shows, el cuarteto cantó, bailó, dedicó piropos a las fans y, por supuesto, partió a casa lleno de obsequios. ¿Qué les regalaron? Además de una bandera nacional que Tomás supo apreciar y usó hasta de capa, los integrantes de Kudai recibieron un álbum de fotos y pines y hasta zarcillos cortesía de su fanaticada emo.

"Aún falta para terminar, pero quiero decir que nos encanta Venezuela, no sólo porque aquí están las chicas más guapas, sino porque nos gusta la hermosura de su paisaje. Venezuela está lista para cambiar al mundo", llegó a decir Pablo, el guitarrista, que se ganó una larga ola de aplausos y suspiros, antes de continuar con Llévame, Quiero mis 15 (del programa homónimo de MTV), Tal vez, Sin despertar, Déjame gritar y cerrar con Lejos de aquí.

Llegó entonces el turno de Amaia Montero, la ex vocalista de La Oreja de Van Gogh, quien se vistió tal como aparece en la portada de su disco debut como solista: con un diminuto vestido rosado.

Una hora y media de concierto que le sirvió a la cantante española para repasar algo del repertorio de La Oreja y estrenar en Caracas sus nuevas canciones, como Ni puedo ni quiero y Mirando al mar, entre otras.

"Gracias, Venezuela& Este país ha sido uno de los primeros que quise visitar porque siento que os debo mucho, os& amo", dijo Amaia Montero antes de pasar a sus viejas canciones y regalar al público el tema Muñeca de trapo, así como 402, que dedicó a su padre antes que muriera.

Eso sin contar que luego montó un medley de sus viejos éxitos: Cuídate, 28 de enero, La playa, Te voy a decir, Rosas y su hit 4 segundos, Tulipán, con el cual se despidió por primera vez. "¡Hasta siempre, Caracas!", dijo y dejó el escenario. Eso sí, sólo por un par de minutos, porque con gritos y aplausos el público reclamó verla de nuevo.

"Pero cómo no iba a cantaros otra, si yo no me quiero ir", soltó Montero para acto seguido complacer a quienes pedían el sencillo Quiero ser. "No os olvidare", soltó. Y para sellar esa promesa canto Puedes contar conmigo, lanzó besos y prometió volver.

duzcategui@eluniversal.com

Daniel Uzcátegui
EL UNIVERSAL

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